Antes de la llegada de Colón, los antiguos pobladores de México ya utilizaban el pazote por sus propiedades medicinales. Sus hojas y sus flores desprenden un fuerte olor debido al aceite esencial que contienen.
Hábitat: es originario de México y América Central. Su cultivo se ha extendido a Estados Unidos, Sudamérica y algunos países del Mediterráneo, especialmente Francia.
Descripción: planta herbácea, vivaz o perenne, de la familia de las Quenopodiáceas, que alcanza de 40 a 100 cms. de altura. Tiene el tallo muy ramificado. Sus flores, de color amarillento o verdoso, son muy pequeñas, y crecen en espigas terminales.
Partes utilizadas: las hojas y las flores.
Propiedades e indicaciones: la esencia del pazote está constituida por hidrocarburos terpénicos (cimeno, limoneno, terpineno, etc.) y ascaridol. Tiene las siguientes propiedades:
Tónico estomacal y carminativo (evita los gases intestinales) : Su uso da muy buenos resultados en las indigestiones, dolores de estómago, flatulencias y falta de apetito.
Antihelmíntico y vermífugo (destruye los parásitos intestinales). Es su aplicación más importante. Resulta altamente eficaz contra los áscaris y los anquilostomas, y no tanto contra las tenias y los oxiuros.
Uso: se toma en infusión, con 15 o 20 grs. de hojas y flores por cada litro de agua. Como tónico estomacal, se toma una taza después de cada comida. Como antihelmíntico, se toma una taza por la mañana en ayunas, durante 3 días. Administrar un laxante después de cada toma de epazote, para favorecer la expulsión de los parásitos (ricino, aloe o cáscara sagrada).
Precauciones: no sobrepasar las dosis indicadas, ya que puede provocar intolerancia digestiva.